Flora fallera

La ofrenda de flores a la Virgen de los Desamparados es para muchos falleros y falleras un momento muy emotivo. A lo largo de la tarde-noche de los días 17 y 18 de marzo, las comisiones falleras de Valencia y alrededores desfilan por las calles de la capital en dirección a la Plaza de la Virgen. Las comisiones falleras están formadas por una comisión infantil y otra de adultos. Todos juntos pueden ser desde pocos centenares a más de mil personas. Al acto de la ofrenda de flores suelen acudir todas las personas que forman parte de la comisión, acompañados de una banda de música, una tradición que data de 1945.

Cada fallera lleva un ramo de flores que se entrega alsvestidorsa la entrada de la plaza.Con los ramos se va confeccionando un manto-tapiz que cubre el cuerpo de la Virgen (unos 12 metros de estructura de madera), el cual se diseña cada año de forma distinta, de modo que las falleras de las diferentes comisiones entregan sus ramos y elsvestidors van colocándolos según los colores de las flores. Esta distribución de los colores de la flor por comisión está coordinada por las comisiones y la Junta Central Fallera, a fin de poder agilizar la confección del manto-tapiz según el patrón diseñado. ¿Qué flores son las protagonistas de estos ramos? Los claveles, por su vistosidad y por su resistencia.

El clavel

Los claveles pertenecen a la familia de las cariofiláceas, concretamente al género Dianthus L. El nombre del género deriva de dos palabras griegas: “Dia” (Dios) y “anthos” (flor). Una de las especies más conocidas es Dianthus caryophyllus L., llamada simplemente clavel, pero hay más de 200 especies diferentes. Esta especie en concreto tiene su origen en la cuenca del Mediterráneo, donde se puede encontrar en su forma silvestre, aunque hoy en día ya se cultivan híbridos para jardinería y flor cortada.

D. caryophyllus es una planta herbácea, cespitosa, de la que salen varios tallos o vástagos con una flor terminal. Las hojas son lineales y planas, brotan de dos en dos de forma opuesta por cada nudo del tallo. Las flores son aromáticas, solitarias o en grupos. Esta especie, y todos sus híbridos, son perennes.En el mediterráneo hay otras especies de claveles silvestres como D. hispanicus Asso subsp. brachyanthus (Boiss.), D. broteri Boiss & Reuter subsp. valentinus (Willk.) Rivas Mart. & al., etc.

Dianthus broteri subsp. valentinus. / Luis Nunes (Wikimedia). Dianthus broteri. / J. Ramírez (Floraiberica.es)

Uso y cultivo del clavel

El clavel se ha cultivado para flor cortada desde mediados del s. XIX. Fue en 1845 cuando fue seleccionado en Lyon. Casi 100 años después, en 1942, William Sim fue quien comenzó a cultivar claveles híbridos que llevan su nombre “Claveles Sim o Claveles americanos”,y son los que se producen en grandes cantidades bajo condiciones de invernadero. Los híbridos cultivados pueden florecer durante todo el año con un mínimo de condiciones apropiadas: pleno sol, riego regular y suelo drenado rico en nutrientes. Cada planta puede producir hasta 20 tallos de 15-18 nudos por de flor al año.Los colores más cultivados son el rojo, rosado, salmón, bicolor y blanco.

Claveles cultivadoss en invernadero (Dianthus caryophyllus Colori Joy). / Blumenfischer (Wikimedia)

Los claveles que se cultivan son de dos clases.: uniflora o estándar, con un gran flor por tallo, y multiflora o spray, con abundantes flores pequeñas en ramillete. Además, hay muchas variedades, como el clavel de Niza, el Sim, el miniatura o spray (cultivado por su flor en ramillete, y que se suelen llamar clavellinas), o el clavel mediterráneo o híbrido uniflor, que cada vez se cultiva más.

El clavel cultivado requiere luz, un intervalo de temperatura entre 8-25ºC y una buena aireación. Se suelen cultivar en túneles o en invernaderos, que según su situación geográfica requerirán calefacción o no. Se recogen a primera hora de la mañana y, tras la recolección, se trasladan a las cámaras para su empaquetado, almacén y transporte.

Claveles blancos y rojos de origen nacional (Almería). Cortesía Feliu Flor Cortada, Valencia. 

Actualmente Colombia es uno de los mayores productores de clavel, exportando principalmente al mercado estadounidense. Otros países productores son Ecuador, Marruecos, Kenia, Costa Rica y Holanda. España también es uno de los países productores, y el cultivo comenzó en la zona de El Maresme (Barcelona), pero hoy en día son las provincias de Cádiz y Almería las que más clavel producen. La producción y recolección del clavel requiere mano de obra pero no grandes inversiones tecnológicas, por lo que hay muchos pequeños negocios familiares que pueden vender su producción llevándola a empresas que comercializan la flor en las subastas.

TradicionEs asociadas al clavel

Los claveles en adornos y ofrendas florales se utilizan desde muy antiguo. Desde la Antigua Grecia hasta el Imperio Otomano, pasando por la Antigua China, hay referencias al uso del clavel. Se dice que fue Luis IX de Francia quien introdujo el clavel en los jardines Europeos, trayéndolos desde Túnez. El clavel, además de en jardinería, puesto que hay más de 200 variedades, también se utiliza en perfumería para fabricar jabones, perfumes y lociones.

Una leyenda cuenta que los claveles nacieron de las lágrimas de la Virgen María, cuando llevaron a su hijo Jesucristo hacia el monte Gólgota cargado con la cruz. Otra versión dice que son las lágrimas de la Virgen a ver a su hijo en la cruz.

El clavel recibe la calificación de “flor nacional española”, aunque no hay documentos oficiales que lo justifiquen. También es la flor de las Islas Baleares.Los claveles se utilizan en fiestas de toda la geografía española: chulapos y chulapas llevan claveles rojos y blancos, las flamencas usan claveles en sus tocados, el poeta Federico García Lorca lo nombra en sus poemas, aparece en la letra de las coplas y canciones de la tuna, se lanzan a las folklóricas cuando se suben a los escenarios y en los festejos taurinos…

[…]
Fui también caballero
una tarde fresquita de mayo.
Ella era entonces para mí el enigma,
estrella azul sobre mi pecho intacto.
Cabalgué lentamente hacia los cielos.
Era un domingo de pipirigallo.
Y vi que en vez de rosas y claveles
ella tronchaba lirios con sus manos.
Yo siempre fui intranquilo,
niños buenos del prado.
el ella del romance me sumía
en ensoñares claros:

¿quién será la que coge los claveles
y las rosas de mayo?
¿Y por qué la verán sólo los niños
a lomos de Pegaso?
¿Será esa misma la que en los rondones
con tristeza llamamos
estrella, suplicándole que salga
a danzar por el campo…?
[…]

“Balada triste”. F. García Lorca

La canción compuesta por F. Galindo y con música de Genaro Monreal, titulada “Clavelitos” ha llegado a ser parte de la ceremonia de clausura de los prestigiosos Premios Cervantes.

Mocita dame el clavel,
Dame el clavel de tu boca,
Que pá eso no hay que tener
Mucha vergüenza ni poca.
Yo te daré el cascabel,
Te lo prometo mocita,
Si tu me das esa miel
Que llevas en la boquita.
Clavelitos, clavelitos,

Clavelitos de mi corazón.
Hoy te traigo clavelitos
Colorados igual que un fresón.
Si algún día clavelitos
No lograra poderte traer,
No te creas que ya no te quiero,
Es que no te los pude traer.
La tarde que a media luz
Vi tu boquita de guinda,
Yo no he visto en Sta. Cruz
Otra mocita más linda.
Y luego al ver el clavel
Que llevabas en el pelo,
Mirándolo creí ver
Un pedacito de cielo.

Genaro Monreal, letra de Federico Galindo (1949).

En la ofrenda a la Virgen de los Desamparados, los claveles cobran un gran protagonismo, ya que con ellos se va confeccionando un manto que durará varios días. Elsvestidors llevan 31 años creando este tapiz cuyo diseño se guarda celosamente año tras año. Cada vestidor tiene su función: unos recolectan los ramos, otros van bordando, otros van indicando dónde colocar la flor. Este año 2018 se han elegido cuatro colores: blanco y rojo mayoritariamente, pero también amarillo y rosa.

 Ofrenda de flores. / V. Gutierrez.

¿Qué especies suelen acompañar al clavel en los ramos?

Los ramos de claveles de las falleras suelen ir acompañados de hojas de diferentes especies. Hace varias décadas los claveles se acompañaban de lentisco (Pistacia lentiscus), pero el papabel (Gypsophila paniculata) es una especie que acompaña al clavel en muchas ocasiones. Hoy en día es fácil ver los ramos envueltos en hojas de aspidistra (Aspidistra elatior) o rodeados de hojas de kentia (Howea forsteriana) e incluso de helecho hoja de cuero (Rumohra adiantiformis).Especies todas ellas con una única misión, engalanar al verdadero protagonista de la ofrenda que tendrá el honor, durante unos días, de vestir el apreciado y visitado manto.

Ramos preparados de clavel y papabel. Cortesía Flores y Plantas Mònica, Mercat de Burjassot.