Febrero en tu jardín

En Espores inauguramos sección mensual de consejos jardineros. Estamos en el mes de las mayores disparidades climáticas en la península, lo cual puede animar a las plantas a brotar pero también puede hacer que el tiempo después hiele estos brotes.

Sabemos por experiencia que mientras el clima va cambiando con las estaciones, también lo hacen los requerimientos de las plantas y su espacio. Saber qué hacer y cómo, dependiendo de la época en la que estemos, es una de las claves para conseguir sacar lo mejor de nuestro jardín.

Aquilegia vulgaris

En el mes de febrero se deben sembrar plantas anuales debajo de un túnel o dentro de arcones con el fin de que estén protegidas. Irán bien Anemone coronaria, Aquilegia vulgaris, Begonia semperflorens, Coleus x blumei, Dahlia variabilis, Gazania splendens, y Convolvulus tricolor, así como bulbosas de floración primaveral, Gladiolus x primilinus, Iris germanica, Ranunculus asiaticus, y rosales.

Ranunculus asiaticus

Además también se pueden sembrar las plantas trepadoras anuales, como es el caso de las campanillas (Ipomoea tricolor), guisante de olor (Lathyrus odoratus), semillando directamente en el lugar elegido y protegiendo las semillas con una cobertura de mantillo. Para la huerta, hay que escoger albahaca, berenjenas, espinacas, lechugas, melones (protegidos), ajos, fresas, hinojo, perejil, calabacín, coliflor, endibia, judías tiernas, y pimientos (en cama caliente).

Taxus baccata

En cuanto a nuestra arboleda, debemos tener en cuenta que hay árboles difíciles de trasplantar, el ginkgo, el algarrobo, la acacia, y casi todas las coníferas porque tienen una raíz principal que si se corta sufre. Para el jardín podemos escoger árboles y arbustos de hoja caduca, y coníferas, y para el huerto hay que plantar frutales a raíz desnuda.

Cuidados concretos

Riego

La frecuencia de riego varía básicamente según el tipo de especies que componen el jardín, el suelo, la época del año y la climatología de la zona. Engeneral se pueden recomendar para febrero sólo riegos de apoyo o mantenimiento cada 20-25 días, si la lluvia no es suficiente.

Hay que regar las plantas perennes únicamente en las horas más cálidas del día con agua a temperatura ambiente o levemente más caliente, sobre todo las plantadas recientemente si no han arraigado aún. Si azotan vientos secos de poniente se debe regar más porque las plantas se deshidratan. Los terrenos arcillosos se riegan con menor frecuencia porque almacenan más agua, y los arenosos retienen poco y necesitan ser regados más a menudo.

Suelo

En febrero las operaciones a realizar en el césped casi se reducen a la mínima expresión, así que aprovecharemos para limpiar, y desinfectar el corta-céspedes, para protegerlo contra la oxidación y para afilar las cuchillas. Debemos rastrillar para quitar las hojas de la superficie, airear y allanar el césped, acabando antes de final de mes todas las operaciones principales de colocación de placas de césped.

Mantillo

Hay que labrar el terreno para airearlo y abonar con mantillo o estiércol 2-4 l/m2, más el mantillo al césped 3/5 l/m2. Evitemos los fertilizantes minerales nitrogenados en invierno, y decantémonos por la materia orgánica como estiércol, mantillo, turba, guano o compost. Se puede incluso guardar las cenizas de la chimenea para fertilizar la tierra.

Además, se debe acolchar el terreno al pie de las plantas con una capa de mantillo, que servirá para proteger a las raíces y cuello de los bruscos cambios de temperatura y de las heladas.

Tratamientos

Es momento de aplicar tratamientos antiparasitarios, repitiendo las pulverizaciones para mayor efectividad. En cuanto al Aceite de invierno, se aplica únicamente sobre árboles ornamentales, frutales y arbustos de hoja caduca, es decir, sobre el ramaje y troncos sin hojas.

Tratamiento con aceite

Otro tratamiento que se aconseja en febrero en las plantas, árboles, arbustos y frutales de hoja caduca (yemas hinchadas) es una infusión de ajo y cebolla útil contra todo tipo de hongos. Se ponen 10 litros de agua con una mezcla de ajos y cebollas picados pero con piel y hojas hasta completar 500 gramos, y se deja macerar 24 horas. Se diluye luego al 10% y se aplica como preventivo y curativo contra enfermedades criptogámicas.

Poda

Tendremos que podar árboles y arbustos caducifolios, como frutales y rosales, pero no las plantas que florecen en primavera porque se eliminan las yemas de flor. Los cortes de poda deben ser limpios, sin desgarros, para que se forme el labio cicatrizante.

La poda de invierno

Podemos podar y cortar árboles y arbustos recién florecidos, eliminando los brotes marchitos y fomentando las nuevas ramificaciones. También los frutales de hueso y pepita, buganvillas, hiedras, hibiscos, tamarix y sauces, y las ramas secas de los cítricos. Los setos también se podan y arreglan cortando 20 ó 30 cm por debajo de la altura prefijada.

Floración y recolección

Florecen la cineraria, el durillo, el laurel, las camelias, los iberis, los narcisos y las fresias. Y hay que recolectar menta, orégano y tomillo.

Invernaderos y plantas de interior

En esta época tenemos que vigilar la calefacción y airear en las horas de más calor de los invernaderos. Podemos alejar las plantas de estufas y calefactores y, para dar más luz a las plantas de interior durante el invierno, acercarlas a una ventana.

Se disminuyen los riegos y se suspende la fertilización, teniendo en cuenta que las plantas de interior necesitan más agua si están en habitaciones con calefacción. Ahora bien, hay plantas que en invierno entran en un proceso de reposo, tendremos que llevarlas a una habitación fresca, sin calefacción. En cuanto a las plantas tropicales se encuentran bien con el calor, pero necesitan aire húmedo, por eso podemos pulverizar las hojas para contrarrestar la sequedad del aire que provoca la calefacción, o poner la maceta sobre un cuenco con guijarros mojados. Otro detalle a tener en cuenta es el de regar con agua tibia, pues a veces la del grifo sale excesivamente fría.

Y también…

Hay otras actividades que se pueden centrar en este mes, como cuidar especialmente la limpieza de malas hierbas en zonas de cultivo y caminos, y repasar los tutores de árboles recientemente plantados para que resistan las inclemencias del tiempo, así como comprobar el estado de los soportes de las plantas trepadoras.

También podemos aprovechar esta época del año para limpiar a fondo las herramientas de jardín que no se usan. Y los macizos, arriates y borduras, se recomponen y escardan, eliminando las malas hierbas, añadiendo después estiércol o compost.

Quitar malas hierbas

Pero sobre todo recordad que los datos aportados, las fórmulas dadas para los tratamientos fitosanitarios, las épocas de floración y poda, la recolección, el riego, etc, están adaptados a las condiciones climáticas de Valencia y deben ser contrastadas con la experiencia personal en cada caso, puesto que de manera decisiva influyen otros factores como las condiciones del suelo, el sistema de riego o la orientación, entre otros.

Así que para cualquier consulta o duda en la interpretación de estos breves consejos, en la ejecución de los trabajos o ante nuevas cuestiones no contempladas en ellos, rogamos que nos consultéis, lo que contribuirá decididamente a mejorar estos apuntes.

Y para terminar, refranero popular de climatología: “En febrero, el loco, ningún día se parece a otro”