Casas con conciencia energética
Persianas que suben solas dependiendo de la incidencia solar, sistemas de frío y calor que se apagan al alcanzar la temperatura óptima o mecanismos para evitar el abuso en el consumo de agua corriente. Con la domótica podemos ahorrar hasta el 50% de consumo de energía en nuestro hogar.
No solo se trata de una cuestión de filotecnología, de estar a la última o de alcanzar cotas de confort extraordinarias, ni de no tener que preocuparnos por apagar o encender la calefacción o el aire acondicionado. La domótica aporta a nuestra vida diaria unas facilidades y una comodidad obvias y nos ofrece una serie de ventajas que se deben, exclusivamente, al desarrollo tecnológico. Estas ventajas se centran en un término muy codiciado en nuestros días, el ahorro energético, que se traduce a su vez en un ahorro económico y en una forma de vida más acorde con el medio ambiente.
Para empezar, ¿qué es la domótica?
Etimológicamente, la RAE explica que el término domótica viene del vocablo latino domus (casa) añadiéndole el final de la palabra informática, y el término hace referencia al “conjunto de sistemas que automatizan las diferentes instalaciones de una vivienda”.
Para la Asociación Española de Domótica (http://www.cedom.es/) este término se utiliza para hablar del “conjunto de tecnología aplicadas al control y la automatización inteligente de la vivienda, que permite una gestión eficiente del uso de la energía además de aportar seguridad, confort, y comunicación entre el usuario y el sistema”. Y por lo tanto, y también según la CEDOM, no debemos confundir domótica con un hogar digital porque, aunque en principio el termino domótica englobaba a los dos, actualmente no. Un hogar digital sería un conjunto de aparatos multimedia conectados entre sí de tal forma que pueden compartir información a través de un protocolo UpnP (por ejemplo, un conjunto PC, impresora en red, televisión digital y teléfono móvil sincronizados se correspondería con esta segunda definición).
Tampoco debemos confundir la domótica con los automatismos básicos, que serían los primeros pasos de la misma, y que podrían ser los enchufes con temporizador o los interruptores que hacen que se active un mecanismo de subida o bajada de una persiana. ¿Por qué esta diferenciación? Porque cuando hablamos de domótica tenemos que tener un factor fundamental en cuenta: la inteligencia. Una inteligencia que, tenemos que puntualizar, no es aleatoria, es decir, que está basada en una acción/reacción que nosotros mismos programamos. Por ejemplo, si nos vamos de vacaciones, podemos hacer que las persianas se suban a media altura y se encienda la luz durante dos horas, simulando que hay alguien en casa. Evidentemente, esto ocurre porque nosotros lo hemos programado así. El siguiente paso tecnológico, extremadamente futurista y por ahora propio únicamente de las producciones de ciencia ficción, iría más allá de la domótica extrayendo un nuevo concepto, el de “casa inteligente” que, en este mismo ejemplo, detectaría que no hay nadie en casa y que de forma independiente a nosotros encendería las luces en un momento determinado.
¿Qué nos ofrece la domótica?
Tal y como explica el manual Cómo ahorrar energía instalando domótica en su vivienda, difundido por el Instituto para la Diversificación y el Ahorro Energético (IDAE), gracias a la domótica podemos “aprovechar mejor los recursos naturales, se puede reducir la factura energética mientras se gana en confort y seguridad“.
Según este mismo informe, la principal ventaja de la domótica es que permite dar respuesta a las necesidades que plantea el modelo de vida actual centrándose especialmente en el diseño de casas polifuncionales, más flexibles y sostenibles. Es decir, según este informe, podemos entender que la domótica es una forma de humanizar y personalizar nuestra casa acorde con nuestra forma de vida.
Gracias a la domótica podemos hacer nuestra casa más versátil cambiando las condiciones ambientales para crear escenas predefinidas, consiguiendo así que la vivienda sea más funcional al permitir el desarrollo de facetas tanto personales como profesionales y de ocio bajo un mismo techo. Entre las virguerías que la domótica nos permite hacer está la gestión inteligente de la iluminación y la climatización, control del agua caliente sanitaria, de los electrodomésticos y del riego. Por no hablar de los sistemas de control que nos permiten detectar y frenar fugas de gas o de agua.
Todo esto se traduce en un aprovechamiento más acertado de los recursos naturales, utilizando tarifas horarias de menor coste y disminuyendo la factura energética. Porque si algo pretende la domótica es gestionar elementos de control que contribuyan al ahorro de agua, electricidad y combustibles notándose sus efectos tanto en el aspecto económico (menos coste) como en el ecológico (menos consumo de energía). La domótica pone la tecnología al servicio del usuario en función de los requerimientos de cada proyecto (casa) y del estilo de vida de quienes la habitan.
¿Dónde está el ahorro?
Pongamos un ejemplo, uno de los campos en los que la domótica está centrando gran parte de sus esfuerzos es en el aprovechamiento de la energía solar. La energía solar es una de las renovables con más posibilidades y también es una de las más desarrolladas, tanto a gran escala, en huertos solares que nutren de energía a poblaciones enteras, como a nivel doméstico.
Ya existe una tercera generación de placas solares, que estarán en el mercado dentro de unos años, y el desarrollo de la tecnología para vivir del Sol es constante. Pues bien, la empresa Velux, especialista en el control térmico, ha desarrollado un sistema gracias al cual la subida y bajada automática de toldos y persianas hace que en verano se reduzca la entrada de calor en el hogar y en invierno aumente.
El secreto está en una serie de sensores de temperatura y radiación ubicados en el tejado de la vivienda. Gracias a un algoritmo patentado, el sistema sabe qué acción llevar a cabo ante las condiciones de luz, de tal forma que en verano, cuando empieza a calentarse el ambiente, baja automáticamente persianas, toldos y cortinas en el momento exacto, minimizando la necesidad de activar el aire acondicionado. Lo mismo en invierno, durante las horas de máxima incidencia solar abre todas las persianas y toldos para que el ambiente en el interior se caldee, cerrándolas de manera automática cuando la radiación disminuye.
Según la propia empresa y los datos del CSTB (Centre Scientifique et Technique du Bâtiment), en verano reduce la temperatura interior hasta 7ºC, disminuyendo la entrada de calor hasta en un 95 %. En invierno, por su parte, el sistema de ventanas en tejados mejora el aislamiento hasta un 27% en función del tipo de cristales, lo que permite un incremento de hasta 2ºC en en interior.
Según el informe de IDAE, la instalación de un sistema domótico que permita gestionar de forma inteligente la iluminación y la temperatura de una habitación de 20 m2 ubicada en un piso en Madrid con orientación sur, generará un ahorro energético del 26%. Algo parecido ocurre si controlamos la climatización de un aparato de aire acondicionado que esté funcionando a una temperatura de tan sólo un grado menos de lo necesario, aumenta el gasto de energía entre un 8% y un 10%. La nueva generación de aires acondicionados incluye este tipo de sensores de control de temperatura, que se regula automáticamente.
Y lo mismo ocurre con el agua: según el informe Cómo ahorrar energía instalando domótica en su vivienda el consumo de agua por habitante al día se estima en 171 litros. El simple goteo de un grifo de lavabo normal implica que al mes puedan perderse hasta 100 litros de agua. Los sistemas domóticos no solo nos avisan de esta situación para que podamos solucionarla, los grifos inteligentes que controlan y eliminan el agua transitoria permiten ahorrar hasta un 25% más de agua que los grifos monomando.
Pequeños avances domóticos en nuestro hogar
Los expertos consideran el año 2005 como el del despegue de la domótica, cuando ésta comenzó a cobrar un interés y una demanda real entre los usuarios, especialmente en edificios grandes. Desde entonces, este sector ha evolucionado mucho y hoy en día nos ofrece una oferta consolidada, tanto en variedad de productos como en precios y en calidad.
Además, las instalaciones domóticas son cada vez más intuitivas y fáciles de utilizar por los usuarios y los instaladores de productos domóticos están más formados, lo que garantiza el servicio de mantenimiento y de postventa. Estos son algunos de los avances domóticos que puedes instalar con total garantía en tu hogar y que te permitirán recuperar tu inversión a medio plazo gracias al ahorro de energía y el aumento de la seguridad y el confort.
– Sistemas de iluminación eficientes: adaptan el nivel de iluminación en función de la variación de la luz solar, la zona de la casa o la presencia de personas. Son capaces de detectar la presencia de personas en zonas de paso, como los pasillos de la vivienda o de las zonas comunes de un edificio, y las iluminan sólo cuando es necesario.
– Control automático inteligente de toldos, persianas y cortinas para aprovechar la luz solar.
– Los nuevos sistemas de aires acondicionados de frío calor incorporan la tecnología denominada inverter, que permite regular la temperatura del hogar en función de la temperatura exterior, la hora del día y la cantidad de luz solar.
– Control o secuenciado de la puesta en marcha de electrodomésticos para que funcionen en las franjas en las que el coste de energía es menor, detección y gestión del consumo “en espera” de los electrodomésticos.
– Sistemas de control y regulación centralizados que permiten detectar y avisar en caso de averías y fugas de agua y de gas que provocan, si es necesario, el corte de suministro ante comportamientos anómalos.
– Control inteligente de riego a través de sensores de humedad y de lluvia que permiten detectar la humedad del suelo y grifos inteligentes que gestionan el caudal y la temperatura del agua corriente en nuestra vivienda.
Para saber más sobre el ahorro energético gracias a la domótica puedes consultar el manual Cómo ahorrar energía instalando domótica en su vivienda, publicado por el Instituto para la Diversificación y el Ahorro Energético (IDAE), el Ministerio de Insdustria, Turismo y Comercio y Aenor Ediciones: http://www.idae.es/index.php/mod.documentos/mem.descarga?file=/documentos_11187_domotica_en_su_vivienda_c7a81517.pdf