Un nuevo híbrido valenciano de tomillo
Investigadores del Jardí Botànic de la Universitat de València han descubierto un nuevo híbrido del género Thymus L. (Lamiaceae) del este de la Península Ibérica. Los ejemplares de este híbrido de tomillo endémico valenciano, Thymus × bolosii, fueron localizados en cuatro lugares de la Sierra de la Safor, entre Valencia y Alicante. Las conclusiones de la investigación se han publicado en la revista Flora Montiberica.
Las especies progenitoras del nuevo híbrido de tomillo son Thymus richardii subsp. vigoi Riera, Güemes & Rosselló y Thymus piperella L. ambas endémicas del este peninsular, aunque la primera solo se conoce a la Sierra de la Safor mientras que la segunda tiene una distribución mucho más amplia que llega hasta Murcia y Albacete. Aun así, el nuevo híbrido “presentaba características diferenciadas desde su recolección en el medio natural, especialmente, en su inflorescencia, no tan alargada como, por ejemplo, la del tomillo (Th. piperella) ni tan compacta como la de Th. richardii subsp. vigoi, aunque es más parecida a esta segunda”, explica el conservador del Herbari del Jardí Botànic de la Universitat de València, Jesús Riera, coautor del trabajo junto con Jaime Güemes y Josep Antoni Rosselló.
Pliego del híbrido Thymus × bolosii. Foto: Herbari del Jardí Botànic de la Universitat de València.
La nueva especie hibridógena ha recibido el nombre de Thymus × bolosii, en homenaje al prestigioso botánico catalán Oriol de Bolòs i Capdevila (1924-2007), gran conocedor de la flora valenciana y autor, entre una extensa obra bibliográfica, de la Flora dels Països Catalans.
La hibridación, origen de nuevas especies
La hibridación entre plantas es un proceso relativamente común y, con frecuencia, puede generar descendencia fértil y dar lugar a la formación de una nueva especie. Es un proceso evolutivo que ha estado muy presente en el origen de gran parte de la flora mediterránea y que todavía está activo, permitiendo observar en la actualidad procesos de especiación. A pesar de esto, la hibridación “puede generar riesgos para la supervivencia de las plantas progenitoras cuando las poblaciones del híbrido se incrementan y la especie hibridógena tiene más vigor que las originales”, apuntan los investigadores del Jardí Botànic.
En este caso, se piensa que la expansión del híbrido Thymus × bolosii podría tener un impacto más grande sobre Thymus richardii subsp. vigoi. Por este motivo, “es importante recoger semillas de esta especie para su conservación en el Banc de Germoplasma del Jardín Botànic y, de este modo, poder disponer de material genético para planificar posibles refuerzos poblacionales con el fin de incrementar el número de individuos reproductores de la especie amenazada”, asevera Riera.
Imagen detallada de las inflorescencias de: a) Thymus richardii subsp. vigoi (VAL-185407); b)Th. x bolosii (VAL-185512); c) Th. piperella (VAL-105771). Foto: Herbari Jardí Botànic de la Universitat de València.
La hibridación también puede ser un riesgo para la flora autóctona si uno de los progenitores es una especie exótica, normalmente procedente de jardines o de restauraciones paisajísticas mal planificadas. Pero este no es el caso que han estudiado los investigadores del Botànic. “La hibridación al género Thymus es muy frecuente en las zonas de contacto entre dos especies. En la Península Ibérica se han encontrado y descrito más de un centenar de híbridos de tomillo, cuando solo se conocen unas 50 especies y subespecies diferentes”, argumenta Jaime Güemes, director del Jardí Botànic.
“En muchos casos, el híbrido entre tomillos es estéril y su presencia se limita a la primera generación. En el caso de la especie que hemos descrito, todavía no hemos hecho un estudio de su biología y no podemos aventurar si se producirá la expansión de su población, ni tampoco si podrá cruzarse con su progenitor”, añade Güemes.
Centro de referencia en investigación botánica
Los trabajos de investigación sobre el género Thymus se iniciaron hace casi tres décadas, a raíz de la incorporación del profesor Josep Antoni Rosselló a la Universitat de València, procedente del Real Jardín Botánico (CSIC). Las islas mediterráneas occidentales constituyen el centro de distribución de Thymus richardii, diversificado en cuatro subespecies, una de ellas en Mallorca, otra en Ibiza, otra en la pequeña isla de Marettino, cerca de Sicilia, y la subsp. vigoi, la única exclusivamente continental, endémica de la Sierra de la Safor.
Los ejemplares del género Thymus fueron localizados en cuatro emplazamientos de la Serra de la Safor. Foto: Blog ‘A un tir de pedra‘.
Thymus richardii subsp. vigoi -descubierta y descrita en 2007 por el equipo formado por Riera, Güemes y Rosselló- supuso la constatación de la presencia de la especie en la Península Ibérica, donde no se veía desde los años 50 del siglo XX. El estudio comparativo de los materiales recolectados por el equipo del Botánico condujeron a la descripción de una nueva subespecie, diferente de las insulares por tener las hojas cordadas a la base y denticuladas al margen. Un hallazgo también publicado a Flora Montiberica.
La distribución de la especie es fragmentada en el Mediterráneo y muestra alguna disyunción singular. Así, la subsp. richardii se encuentra en Mallorca y en algunos lugares de la Península Balcánica. El resto de entidades, muestran áreas muy reducidas con pocas poblaciones como, por ejemplo, las presentes en la isla Marettino (subsp. nitidus), a la de Ibiza (subsp. ebusitanus) o en La Safor (subsp. vigoi).
Hallazgos de flora valenciana como este muestran la relevancia de la investigación universitaria para contribuir al conocimiento científico de la biodiversidad. El Jardí Botànic de la Universitat de València es el principal centro de investigación botánica de la Comunidad Valenciana. Su Herbari apoya en los estudios sobre flora valenciana y su Banc de Germoplasma conserva las semillas de las especies valencianas más amenazadas. Los investigadores y las investigadoras estudian la flora para completar el catálogo de la diversidad vegetal valenciana.
