Jardines

7 Abr 2016

Wave Hill, un jardín en el Bronx de Nueva York

Os contamos uno de los secretos mejor guardados de la ciudad de los rascacielos. Vistas increíbles, jardines temáticos y actividades culturales con origen en el s. XIX. 

Hoy en día mantener un jardín de incognito no es posible por mucho tiempo. Internet se ocupa de desvelar rápidamente todo lo que se nos antojaba un lugar por descubrir. Sin embargo, se comenta que este jardín es uno de los secretos mejor guardados de Nueva York. Supongo que eso quiere decir que las noticias corren, pero no todas vuelan, y que, tal vez, tenemos un destino casi secreto que añadir a nuestra lista de lugares dignos de visitar si viajamos a esa ciudad.

Wave Hill en Riverdale

Para visitar Wave Hill tenemos que situarnos en el Bronx, único distrito metropolitano de la ciudad de Nueva York que no está sobre una isla (a excepción de una pequeña parte de Manhattan conocida como Marble Hill). Algunas zonas del Bronx, sobre todo las del sureste, han alcanzado un alto nivel de deterioro, pero Wave Hill se encuentra en el noroeste del Bronx, concretamente en Riverdale, un barrio residencial de clase media alta, donde predominan las viviendas unifamiliares.

Además de ubicarse en esa zona favorecida, Wave Hill tiene otro privilegio, las vistas al rio Hudson y los acantilados de los Palisades del Bronx, en el noreste de Nueva Jersey y el sur de Nueva York. Además de los jardines y sus extraordinarias vistas, la finca incluye dos casas y está catalogada dentro del Registro Nacional de Lugares Históricos de los Estados Unidos.

Miremos atrás

Para conocer la historia de Wave Hill hay que remontarse a 1843, cuando fue construida la casa original por William Lewis Morris en lo que se conoce como el estilo Greek Revival. La casa se amplió entre los años 1866 y 1869, y nuevamente en 1890.

 

En 1903, George W. Perkins, socio de J.P. Morgan, adquirió la Mansión Wave Hill. Desde 1895 acumuló propiedades hasta crear un complejo residencial a orillas del río, que incluía una casa de campo en el lugar donde ahora se encuentra la Mansión Glyndor. Perkins mejoró las magníficas vistas e incorporó invernaderos, una piscina, terrazas y el centro recreativo que ahora lleva el nombre de Ecology Building (Edificio de la ecología). Del otro lado del río, la intervención de Perkins fue fundamental en la preservación de Palisades.

En 1960, los propietarios de entonces, la familia Perkins-Freeman, donaron Wave Hill a la ciudad de Nueva York. Hoy en día, Wave Hill está dirigida por una organización cultural independiente sin ánimo de lucro, y los edificios y terrenos son propiedad de la ciudad de Nueva York.

Con la asistencia de la Presidencia del Distrito del Bronx, representantes del Bronx del Consejo de la Ciudad y de la Legislatura del Estado, Wave Hill se financia con fondos públicos a través del departamento de Asuntos Culturales de la Ciudad de Nueva York, el Consejo de Artes del Estado de Nueva York, una agencia estatal y el Fideicomiso de Herencias Naturales del Medio Ambiente. Además, fundaciones, corporaciones e individuos contribuyen con un vital soporte adicional.

12 jardines en un jardín público

Wave Hill no es un solo jardín, sino diversos espacios ajardinados que acaban formando 12 jardines temáticos, con una superficie total de 11,5 hectáreas. Todos están pensados para ser disfrutados a lo largo de las cuatro estaciones, de hecho su sitio web muestra imágenes de los 12 jardines, agrupadas a su vez en cada una de las cuatro estaciones del año. Más fácil imposible.

Se puede pasear por el jardín de plantas perennes, el de plantas silvestres, el jardín de plantas que sirven de alimento a las abejas, el de las plantas acuáticas o el jardín alpino. El jardín de flores lo componen, entre otras, diversas especies de plantas vivaces, bulbos de primavera y arbustos de flor.

En el jardín de monocotiledóneas destacan gramíneas ornamentales, hostas, palmeras, ágaves y yucas, y el el jardín de hierbas y jardín seco alberga plantas traídas de las regiones más cálidas del mundo. Incluso tienen colecciones especiales, que incluyen una bordura sombreada, un jardín elíptico y una ladera de coníferas.

Impresiona también su bosque nativo, con una superficie de 4 hectáreas, y es que los árboles son la piedra angular del paisaje de Wave Hill y equilibran la estructura de unos jardines siempre cambiantes. Además, ofrecen alimento y refugio para la vida silvestre y proporcionan una sombra más que bienvenida para los visitantes, especialmente en la temporada estival.

11

Por último, es realmente encantador el invernadero “Marco Polo Stufano”. La pérgola y las vistas sobre el río Hudson y los Palisades del Bronx ponen la guinda a este delicioso pastel.

Un Centro Cultural en el jardín

Junto con las actividades relacionadas directamente con la jardinería, que incluyen cursos y conferencias, entre otras, también se realizan todo tipo de eventos y celebraciones. Pero el otro plato fuerte de Wave Hill, aparte de sus maravillosos jardines, es su actividad como Centro Cultural.

Exposiciones, música o danza, entre otras manifestaciones artísticas, se dan cita durante todo el año en dos espacios: Glyndor Gallery y Sunroom Project Space. Su pretensión es explorar una relación dinámica entre la naturaleza, la cultura y el propio lugar. Sin duda, resulta sencillo que esto se produzca, porque el entorno pone mucho de su parte.

Los horarios de visita, tarifas y otra información de interés sobre Wave Hill se pueden consultar en el siguiente enlace dentro de su página web. Yo de vosotros no me lo perdería, si lo visitáis será algo de lo que presumir.

Todas las imágenes vía Wave Hill.

Etiquetas
María José Holguín, editora y autora del blog.
Desde 2011 comparto contenidos sobre plantas, jardines y vida verde, que combino con fotografía y arte en el jardín. Vivo en Valencia, donde he sido viverista durante 17 años, y estoy licenciada en Publicidad en la Facultad de C. de la Información de la Universidad Complutense de Madrid.
extern Colaborador Externo
Send this to a friend