Hortalizas submarinas

Os presentamos las biosferas, unos invernaderos submarinos que cultivan verduras y hortalizas en el fondo marino de las costas de Italia. Este huerto ha sido bautizado por su inventor como Nemo’s Garden y hoy os lo describimos con detalle.

Quizás ya no recordéis a Veggie, el huerto espacial  del que os hablábamos hace unos meses o las verduras astronautas que Eva Pastor nos presentó. Hoy hablamos de los invernaderos submarinos que, hace 4 años, están en funcionamiento en las costas de Italia.

Una idea extraña

Este proyecto pertenece a la empresa italiana de equipamiento submarino Ocean Reef Group. Pero se preguntaréis, ¿qué relación tiene una empresa como ésta con el cultivo de verduras y hortalizas? Pues bien, el jefe de la empresa, Sergio Gamberini, además de dedicarse al submarinismo ya cultivaba sus propias verduras cuando se dio cuenta la cantidad de plagas que atacaban las plantas. Muchos de estos organismos plaga llegaban por la tierra así que se interesó por la hidroponía, el cultivo sin suelo. Sólo fue cuestión de tiempo que unificará su trabajo de submarinista con su pasatiempo, la horticultura.

 Interior de una Biosfera

 Nemo’s Garden el las costes italianas

Así nacieron las biosferas, un tipo de escafandras gigantes que contienen tomateras, albahacas, guisantes … Aquí en la temperatura es de 29º C y la humedad se mantiene en 90.5%. Puesto que las biosferas no se encuentran a una profundidad superior a los 10m, la luz solar llega perfectamente a las plantas.

En cuanto al riego, estos invernaderos son autosuficientes a pesar de estar rodeados de agua salada del mar Mediterráneo y es que el ingenio y la ciencia más básica han resuelto este problema: el agua salda contenida en la parte baja del invernadero se evapora debido a la temperatura de casi 30°C del interior de la biosfera y asciende por las paredes del invernadero hasta llegar a la parte más alta y fría donde se condensa y se convierte en agua dulce apta para el riego.

Ventajas e inconvenientes
Una de las principales ventajas de este tipo de cultivo es la escasa o nula interacción que las Biosferas establecen con el medio marino sin causar ningún impacto. Por otra parte, el hecho de que generan su agua de riego tal y como hemos explicado más arriba ya es un triunfo así como no producir residuos. Sergio Gambini ve en su proyecto una solución sostenible al cultivo en países costeros en desarrollo donde las tierras son demasiado áridas. Además, la vida submarina protege las plantas de los ataques de las plagas.

Sesión de aprendizaje del buzo-hortelano

A pesar de todas estas ventajas, las biosferas no presentamos como una especie de panacea y sus inventores y productores lo saben. Para recoger las verduras y las hortalizas hay todo un equipamiento que hace imposible la producción autónoma por parte del campesino y encarece el producto.

En cualquier caso, este es un proyecto experimental que trabaja con el método científico y tienen un registro estricto de las condiciones físico-químicas de cada Biosfera, el tipo de sustrato utilizado, las especies de cultivo y un laboratorio lleva a cabo los estudios adecuados en colaboración con el Centro de Experimentación Agrícola y Asistencia de Savona, ciudad donde se desarrolla este proyecto gracias a los estudios del que concluyeron que el afabega submarina es bien parecida a la terrestre. Y es que además de un huerto, cada Biosfera es un laboratorio submarino.

Desde 2012 que estas biosferas están en funcionamiento y fue en 2014 cuando pudieron saborear la primera cosecha submarina pero muchas preguntas están abiertas: ¿son estas instalaciones interesante para los balnearios? ¿O para el turismo ecológico? Podríamos utilizar las instalaciones también para otros fines como desalar agua de mar? En estos años se observó que muchos animales marinos espontáneamente comenzaron a habitar el lugar del experimento el cual podría funcionar como estación submarina para el seguimiento de la fauna o cría de corales.

Kit a la venta en acuarios: Mini Nemo’s Garden

Pero no sólo las instituciones científicas pueden aportar datos sobre el cultivo submarino. La ciudadanía puede adquirir un Mini Nemo s Graden y protagonizar su propio experimento para compartir luego los datos. El kit completo contiene la Biosfera, el apoyo para las semillas, el sustrato y un sistema de anclaje y está a la venta en acuarios! Pero si no tienes acuario y quieres participar del proyecto puedes coll·laborar económicamente a través de la campaña de micro-mecenazgo.

Saber más:

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