Conservación Plantas

14 Mar 2024

Posidonia oceanica, la planta olvidada en el fondo marino

Posidonia en el fondo marino./National Geographic.

¿Alguna vez te has preguntado cuáles son las plantas que pueblan nuestros mares y océanos? Es probable que te vengan a la cabeza algas coloridas y corales exuberantes, pero en el Mediterráneo tenemos que destacar además, una joya única y excepcional, la posidonia oceánica. Esta semana, en espores, de la mano de Isabel Sanjuan nos sumergiremos en el fondo de nuestro litoral para descubrir los secretos de esta planta extraordinaria. Exploraremos su fascinante ciclo de vida y analizaremos su papel esencial como hábitat clave para la biodiversidad submarina y la conservación de nuestro ecosistema costero. Isabel os desafía además a convertiros en defensores de este tesoro submarino, porque solo con conocimiento y acción, podemos garantizar que las futuras generaciones puedan disfrutar de las maravillas de esta planta vital para nuestro ecosistema marino.

¿Sabías que en el mar no solo hay algas? De hecho, es bastante seguro que alguna vez hayas encontrado una planta acuática mientras disfrutabas de un día de playa. Ahora que llegan pascuas y falta poco para el verano, es posible que visites el mar y, con suerte, te encuentres restos de hojas en la línea de costa, hojas alargadas y marrones que a veces los turistas denominen basura. No obstante, estas hojas que a simple vista pueden parecer asquerosas y sucias son un verdadero tesoro de nuestro litoral.

Hoy hablaremos de la Posidonia oceanica, una planta marina muy importante que por su aspecto y ubicación puede ser confundida con un alga, pero que no lo es. En realidad, es una planta acuática endémica del mar Mediterráneo, donde puede encontrarse en los fondos marinos someros, cerca de la superficie y hasta profundidades de 30 o 40 metros si las aguas son suficientemente transparentes. Esta planta ocupa gran parte del litoral mediterráneo formando extensas praderas que acogen mucha biodiversidad marina.

Descripción botánica

La Posidonia oceanica es una planta angiosperma, es decir, con flores. Pertenece en la clase de las monocotiledóneas, al orden Alismatales y a la familia Posidoniaceae. Y como hemos dicho que es una planta, tiene raíces, tallo o rizoma (un tallo subterráneo que puede extenderse a lo largo de kilómetros) y hojas en forma de cinta, que le dan un aspecto similar al de muchas plantas herbáceas terrestres. Además, a diferencia de las algas, puede crecer tanto en un sustrato arenoso como rocoso.

A la izquierda fanerógamas marinas./ecologistasenaccion.org. A la derecha ilustración de Posidonia oceanica./ Planeta vivo, Cuaderno de campo. Ilustración de Raúl García Quiñones.
Posidonia en el fondo marino./marilles.org. Fotografía de Miguel Comilla.

Durante el otoño, la posidonia empieza su periodo de floración y reproducción, que puede ser tanto sexual (mediante polinización hidrófila) como asexual (mecanismo predominante que consiste en la reproducción vegetativa a partir de la elongación del rizoma). Sus flores son hermafroditas, poco vistosas y se agrupan en inflorescencias.

También en esta estación sus hojas cambian el color verde oscuro por el marrón, y posteriormente, se desprenden y llegan a la línea de costa, a veces en forma de pelotitas envueltas llamadas bolas de Neptuno. En la primavera producen sus frutos, las olivas de mar. Por último, una característica singular de esta planta es su reducida tasa de crecimiento, que en el caso de los rizomas es solo de 0,5 a 1 cm por año.

A la izquierda fotografía de semillas de Posidonia./ foravila.net. A la derecha fruto de Posidonia oceanica./Pinterest. Fotografía de Joana Oliver Rubio.

Una planta fundamental y poderosa por su valor ecológico

Nos atrevemos a decir que la posidonia actúa como una verdadera heroína en las aguas del Mediterráneo, puesto que desarrolla funciones de gran relevancia en la conservación y mejora del ecosistema. Por un lado, es capaz de retener los sedimentos arenosos entre su rizoma. ¿Cómo? Porque las partículas que precipitan a las praderas se depositan entre las raíces y rizomas y acaban formando un sustrato compactado llamado “mata”, una estructura muy perdurable que con el tiempo da lugar al sistema “escollo-barrera”. Esta estructura disminuye la energía hidrodinámica sobre el litoral, protegiendo las playas de la erosión de las olas y la pérdida de arena, un problema bastante común de nuestro litoral levantino. Además, mantiene las aguas cristalinas y la arena blanca, todo un símbolo de calidad ambiental y un factor apreciado por quien pasea por una playa.

En cuanto a las hojas marrones que llegan a la costa, también actúan como protectoras de las playas mitigando el impacto que el oleaje tiene sobre la línea de rompiente. Además, las bolas de Neptuno son capaces de atrapar microplásticos entre sus fibras, limpiando las aguas de residuos. Así que ya sabes, cuando te encuentras estos restos vegetales no pienses: ¡qué sucia está la playa! sino todo el contrario.

Bolas de Neptuno./Etsy

Simultáneamente, la posidonia actúa como pulmón y filtro marino, produciendo oxígeno en grandes cantidades, capturando carbono disuelto y manteniendo las aguas limpias y transparentes. Es tan relevante su función ambiental que se estima que 1 metro cuadrado de pradera de posidonia genera tanto oxígeno como el equivalente a 10 metros cuadrados de bosque tropical. En cuanto a su capacidad de capturar y almacenar carbono, está probado que la posidonia también puede atrapar más del doble del carbono que los bosques tropicales y templados del mundo. De esta forma, las praderas contribuyen a la mitigación de los efectos del calentamiento global. Así que imagina la importancia de su conservación, de la que después hablaremos.

Además, las praderas de posidonia están consideradas “Puntos calientes” de biodiversidad, con una importancia ecológica similar a la de los escollos de corales o los manglares. Estas formaciones vegetales sirven como hábitat permanente, zona de cría, alimentación y refugio además de 1000 especies de fauna y más de 400 especies vegetales. Entre la diversidad asociada a estas praderas encontramos varias especies de pescados, algas, bivalvas, equinodermos, cnidarios o gasterópodos.

Javier Murcia. Extret de Ruiz J. M., Guillén J. E., Ramos Segura A., Otero M. M./ Atlas de las praderas marinas de España. Instituto Español de Oceanografía.

A pesar de parecer exagerado, la posidonia es considerada por el mundo científico como el ser vivo más longevo del mundo, ¡con edades que llegan hasta los 100.000 años! Y es que su extenso rizoma tiene la capacidad de crear clones de un mismo individuo muy lejanos los unos de los otros, algunos de ellos separados por distancias de más de 15 kilómetros.

Posidonia oceanica./ elecoturista.com. Fotografía de Sergio Arribas.
Pradera de posidonia./Revista Mètode. Fotografía de Balma Albalat Oliver.

Los valores culturales asociados a la posidonia

La posidonia ha sido tradicionalmente conocida como “hierba de Neptuno”, y a lo largo de la historia ha tenido varios usos. Por ejemplo, hay evidencias de que hace unos 100.000 años se utilizaba su hojarasca a modo de colchón para dormir, y en el Egipto las bolas de Neptuno eran usadas para el forraje de sandalias. Otros usos que ha tenido la planta históricamente y que todavía pueden darse han sido: para rellenar almohadas, para producir pasta de papel, aplicaciones en la construcción (porque las hojas son recalcitrantes y actúan como aislantes), usos agropecuarios, combustible para hogueras o incluso como remedio medicinal, dado que contiene sustancias fungicidas, bactericidas y antivirales.

Hojarasca de posidonia utilizada como aislante en construcción de vivendas públicas en las Islas Baleares./GOIB

Qué amenazas sufre la planta

Desgraciadamente, este tesoro marino se encuentra amenazado a causa de diferentes factores. La pesca de arrastre y los dragados de los fondos marinos son dos de las amenazas que más efectos negativos originan sobre las praderas, disminuyendo notablemente su densidad y cobertura y fragmentando su extensión.

La modificación de la línea de costa supone otra seria amenaza, dado que la construcción de infraestructuras turísticas, urbanas o industriales al litoral (puertos, paseos marítimos, hoteles, playas artificiales, etc.) desencadenan la desaparición directa de las praderas por la destrucción del fondo marino, o su deterioro severo por la modificación de las condiciones ambientales idóneas para el crecimiento y supervivencia de la planta.

En este sentido, uno de los problemas es el aumento de la turbidez y la salinidad de las aguas. El medio marino es receptor de todo tipo de contaminantes, derrames y actividades (como por ejemplo el fondeo de las embarcaciones o la acuicultura) que tienen como consecuencia el aumento de la suspensión de sedimentos marinos, fluviales o de otro tipo, que reducen la transparencia del agua y afectan negativamente a las praderas.

Así mismo, la contaminación marina provoca efectos devastadores sobre las praderas. Esta planta es considerada un bioindicador de la calidad de las aguas, y como es tan sensible el derrame de aguas residuales o residuos industriales, entre otros, hacen peligrar su supervivencia, provocando la reducción de las praderas al litoral. No obstante, medidas como la construcción y mejora de las instalaciones de plantas depuradoras de aguas residuales y la implantación de sistemas de control de calidad han conseguido estabilizar la reducción de la especie.

Por último, la presencia del alga Caulerpa racemosa también hace peligrar la supervivencia de la posidonia; en concreto la variedad cylindracea, una especie invasora originaria del suroeste de Australia que tiene potencial para hacerla desaparecer y reducir considerablemente la biodiversidad marina una vez invade el ecosistema. Es tan peligrosa porque contiene toxinas que impiden que la fauna pueda consumirlas, de forma que no tiene depredadores naturales que regulan su crecimiento y expansión.

Caulerpa cylindracea Sonder./ Inventaire National du Patrinoine Naturel

¿Cómo proteger la posidonia?

Cómo podréis imaginar el anterior listado de amenazas es muy preocupante, dado que el crecimiento de la posidonia es muy lento y no siempre puede recuperarse de los impactos negativos que lo afectan. En este contexto, y por su importancia en la biodiversidad del medio marino mediterráneo, la posidonia está catalogada por la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres y se incluye dentro del Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial en el Mediterráneo. Además, para garantizar su protección, la posidonia se encuentra incluida como hábitat prioritario en la Directiva de Hábitats de la Unión Europea.

Para garantizar la protección de la posidonia frente a los impactos de la pesca de arrastre, el Reglamento de Pesca de la Unión Europea para el Mediterráneo prohíbe expresamente esta técnica sobre las praderas de angiospermas marinas, y a modo de actuación directa, durante los años 1980 y 1990 se instalaron escollos artificiales anti-arrastre que imposibilitaban la acción erosiva de las redes de pesca sobre los fondos marinos.

Actualmente, están desarrollándose gran cantidad de actividades divulgativas y didácticas entorno a la posidonia, como ahora el proyecto Life Posidonia Andalucía, el Festival de la Posidonia y la ruta de la Posidonia en Formentera o el manual de seguimiento de praderas del IEO (Instituto Español de Oceanografía) dirigido al buceador voluntario.

Destacamos también POSIMED, una plataforma de participación ciudadana creada con el objetivo de coordinar las redes de seguimiento de las praderas de posidonia de la Estado Español, comunicar los avances con buceadores voluntarios que participan, y comunicar los resultados en la población, favoreciendo la difusión de conocimiento e involucrando a la sociedad en la conservación marina.

¿Dónde encontraré posidonia?

Si te preguntas dónde puedes encontrar praderas de posidonia, en el litoral valenciano hay distribuidas en todas las provincias. A pesar de que en Alicante su presencia destaca considerablemente, pudiendo encontrar en la práctica totalidad de municipios costeros alicantinos salvo Guardamar del Segura, donde la influencia de la desembocadura del Segura no permite la proliferación de la planta. Entre las zonas más remarcables están la zona Santa Pola-Altea, y especialmente la pradera que se extiende entre el Cabo Huertas y la Isla de Tabarca, que resultó ser la Primera Reserva Marina declarada en la Estado Español.

A la izquierda distribución de posidònia en el País Valencià./Atlas y manual de los Hábitats Españoles. A la derecha Pradera de P. oceanica en la reserva marina de Tabarca./Atlas de las praderas marinas de España. Instituto Español de Oceanografía. Fotografia de Juan M. Ruiz

En València, la posidonia es más escasa, pero puede encontrarse igualmente en zonas como el Cabo de Cullera (entre Oliva y Tavernes de la Valldigna) y en algunas zonas de Sagunto como la Pobla de Farnals o Canet d’en Berenguer. En la provincia de Castelló hay praderas localizadas entre Alcossebre y Oropesa del Mar con un buen estado de conservación. Ahora que ya sabes cómo es, que hace y donde encontrarla, ¿te animas a hacerle una visita el próximo verano?

Bibliografia

AQUAE fundación: Posidonia oceànica, la planta esencial del Mediterráneo.
Buceo en la Comunitat Valenciana. Posidonia oceanica.
Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico (MITERD). Posidonia oceanica.
National Geographic. Posidonia, una planta para salvar el Mediterráneo.
Ruiz J. M., Guillén J. E., Ramos Segura A., Otero M. M. (2015). Atlas de las praderas marinas de España. Instituto Español de Oceanografía.

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Estudiante de Ciencias Ambientales en la Universitat de València
Me gusta hacer senderismo, bucear y pasar tiempo con mis amigas. Aunque lo intento, no soy capaz de recordar los nombres de la mayoría de animales y plantas que veo cuando hago excursiones. Estoy obsesionada con hacer listas de todo aquello que quiero hacer y me encanta fotografiar las cosas absurdas o ingeniosas que me encuentro por la calle.
extern Colaborador Externo
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