10 árboles monumentales y singulares del Botànic
Esta semana al Jardín Botánico celebramos que el día 31 de enero fue el Día del Árbol en la Comunidad Valenciana. Por eso, ese día tuvimos visitas guiadas especiales sobre nuestro arbolado y una jornada de puertas abiertas. Además, hemos preparado esta galería de 10 de los árboles monumentales y singulares del Botánico que no os podéis perder. ¿Os animáis a visitarnos y disfrutar juntos de la naturaleza, el sol invernal y, sobre todo, de nuestros árboles?
¡Recordad pedir un plano del Jardín en la entrada para ubicaros! Y tened en cuenta que las cuadrículas de la Escuela Botánica están numeradas del 1 al 16 empezando por la derecha sur y siempre contabilizando en dirección este-oeste.
Paseando por el muro oeste del Jardín que sigue la calle Beata Gaspar de Bono, a la altura de la cuadrícula 12, encontraremos el Platanero de sombra, que por su nombre no debe confundirse con el plátano de la fruta, puesto que a la vista está qué no se parecen por su aspecto. Esta especie está totalmente ligada al urbanismo por sus características fisiológicas y biomecánicas. Su tamaño y estructura lo hacen ser uno de los árboles que más sombra puede generar, a pesar de su fructificación, no es un árbol tan alergénico como se cree.
Este árbol propio del clima mediterráneo, conocido por sus hojas punzantes, lo podréis encontrar fácilmente a la derecha de la plaza de las magnolias. Su leña es muy apreciada en invierno y su fruto, las bellotas, comestibles, pero con grandes cantidades de taninos, son utilizadas para la industria cosmética y médica, además de ser una de las primeras fuentes de alimentación porcina.
Al lado izquierdo de la plaza de las magnolias se encuentra el Olmo del Cáucaso, un árbol majestuoso y elegante que destaca por sus largas y flexibles ramas, y que en el otoño se rodean con un follaje dorado muy destacado. Es comúnmente utilizado por la industria de la construcción, pero uno de sus usos más apreciados se encuentra en el arte del Bonsái.
Recorriendo la Escuela Botánica, en la cuadrícula 9 junto al Podocarpus neriifolius, se encuentra uno de los ejemplares más emblemáticos de Almez entre los que cuenta el Botánico. Individuo de porte irregular y con mucha densidad de masa foliar, muy utilizado como ornamental por la sombra que genera y por la tolerancia a la alta contaminación. Resaltamos su madera, muy útil para fabricar mangos y herramientas tradicionales, destacando las del Valle de Ayora, en València.
Paseando por el corredor central del Jardín, frente al Quercus ilex, encontramos la Choricia, una especie ornamental que cuenta con múltiples acúleos leñosos y cónicos por todo su tronco. En ella destacamos sus grandes frutos verdes en cápsula, que aparecen tras su floración llamativa, de los cuales se extraen fibras muy utilizadas tradicionalmente como aislamiento térmico o para rellenar almohadas y colchones.
Junto al edificio de investigación y la antigua entrada al Jardín, se encuentra el único ejemplar del género Eucalipthus de estas dimensiones dentro del Jardín Botánico, en estado maduro y con una muy buena vitalidad. Muy utilizado por la industria papelera, sin embargo, destacamos su función medicinal para tratar enfermedades respiratorias, por sus propiedades antisépticas, expectorantes e inflamatorias.
Gran gimnosperma elegante, con hojas y madera muy características y una copa abundante, muy empleada en jardines como acompañante de elementos arquitectónicos o escultóricos por su belleza exótica notoria. Al Jardín acompaña al estanco tropical y al Ginkgo biloba.
Al echar un vistazo a la parte izquierda de la entrada del Jardín, podremos observar las coníferas, y con ellas, un gran pino de tronco rectilíneo muy admirado por su madera, utilizada para la fabricación de muebles de lujo. Esta especie es muy visitada por nuestras amigas las abejas, dando una miel de alta calidad.
La Tipuana es un árbol notorio en parques y paseos por su belleza floral a finales de la primavera y principios del verano. Su ubicación dentro del Jardí Botànic, junto al bosque, y la anchura de su copa proporcionan unos de los rincones más especiales para leer y disfrutar de la tranquilidad. Como curiosidad destacamos que, cuando podemos este árbol, su savia es de color rojo, como nuestra sangre, de aquí su nombre común, palo rosa. Otra característica importante es que presenta un comportamiento caducifolio tardío, es decir, sus ramas se defolian cuando el resto de árboles ya tienen hojas y después de su floración.
El Roble de Virginia te da la bienvenida a las puertas del Jardí Botànic. Es un ejemplar maduro y con un buen desarrollo estructural. Tiene múltiples usos tanto por su madera utilizada en la industria naval, como por sus bellotas de las cuales se extrae aceite, además, sus raíces forman tubérculos comestibles.