¡Estoy hecho un manojo de nervios!

Los nervios son una sensación muy común en época de exámenes, ¿quién no los ha padecido alguna vez? En algunos casos, pueden llegar a convertirse en un verdadero obstáculo, ya que nos hace vulnerables y nos incapacita ante aquello a lo que hemos dedicado horas y horas de esfuerzo y trabajo. Para hacerle frente, ¿qué mejor que recurrir a la botánica?

Pongámonos en situación… estás a punto de entrar en el aula y empiezas a sentir un cosquilleo o dolor en el estómago, el corazón te late más rápido de lo normal, los músculos se te tensan y te invade el miedo a quedarte en blanco, pero haces lo posible por respirar hondo y concentrarte. Ésta es la típica sensación que muchos hemos de soportar momentos antes de enfrentarnos a la hoja del examen.

Imagen de Flickr. Autor: Universidad de Navarra 

Además, a parte de las sensaciones pre-examen, durante la época de estudio también podemos desarrollar una serie de síntomas físicos y emocionales: cansancio, falta de concentración, problemas para dormir, inquietud… Pero tranquilos, ¡en espores tenemos la solución! Ciertas plantas, poseen propiedades que nos ayudarán a combatir el nerviosismo de una forma natural sin necesidad de recurrir a medicamentos. A continuación os mostraré algunos remedios naturales para hacer de ésta una situación más llevadera. ¡Tomad nota!

Relax, take it easy
Qué fácil es de decir, pero primero que tenemos que hacer es relajarnos y la forma más común de administrar las plantas que nos ayudan a calmar el estado de excitación nerviosa es la infusión (se extraen los principios activos solubles de la planta al introducirla en el agua). Estas plantas suelen contener principios activos tranquilizantes, aceites calmantes o aminoácidos relajantes para el sistema nervioso.

Valeriana officinalis L. Imagen de Flickr. Autor: Rictor Norton & David Allen

Si unimos los conceptos ”planta” y ”relax”, el primer tranquilizante natural que se nos viene a la cabeza es la valeriana (Valeriana officinalis L.). Actúa como agente sedante, relajando el sistema nervioso y el cerebro. Su principal uso está relacionado con los trastornos del sueño e insomnio, síntoma frecuente en la época de exámenes, ya que la falta de horas de sueño, el cansancio y la intranquilidad, hacen que no se descansen las horas necesarias. Se utiliza el aceite que se extrae de sus raíces.

Preparación de infusión de valeriana:
– Se dejar reposar 15 g de raíz en un vaso de agua durante toda la noche.
– A la mañana siguiente se cuela el líquido y se bebe (siempre se puede endulzar con miel o azúcar). Se pueden tomar un par de vasos al día. 

Hojas de tilo. Imagen de Flickr. Autor: Rudolf Schäfer 

Otra de las infusiones más populares para calmar y apaciguar los nervios, y disminuir la ansiedad, es la infusión de tila (Tilia cordata, Tilia platyphyllos). Destaca su capacidad sedante muy útil en los estados de excitación nerviosa e inquietud, por tanto ayuda a conciliar el sueño y descansar. En este caso, la parte de la planta que se aprovecha es la flor, las cuales, conviene recogerlas en un día de sol y aire seco para que se sequen rápidamente. 

Preparación de infusión de tila:
– Se coloca un vaso de agua a calentar hasta que hierva, mientras se pone media cucharada de flores secas en una taza.
– Cuando esté hirviendo, se verterá el agua sobre las flores.
– Se tapará la taza y se dejará reposar durante 5 minutos para que no se evaporen los aceites donde se encuentran la mayor parte de los beneficios de la tila.
– Finalmente se cuela y se endulza con miel y azúcar. Se pueden consumir dos tazas al día. 

Melissa officinalis L. Imagen de pixabay. Autor: zrenate 

Dicen que solo con oler la melisa (Melissa officinalis L.), somos capaces de relajarnos y templar los ánimos gracias al intenso aroma alimonado que emanan sus hojas al frotarlas. Es útil para combatir los estados nerviosos por su efecto sedante, sobre todo en casos de ansiedad puntuales. Se recolecta cuando está a punto de florecer y se deseca con rapidez. En cuanto a la preparación de la infusión, se seguirá el mismo procedimiento que con la tila. 

Passiflora caeurulea. Imagen de Wikimedia commons.

La belleza de sus flores caracteriza a la pasiflora o flor de la pasión (Passiflora caeurulea), especialmente interesante cuando los nervios no nos dejan dormir; se aprovechan tanto las flores como las hojas. Como es una planta tropical es difícil acceder a ella, ya que su cultivo se limita a la jardinería ornamental. Sin embargo, podemos encontrar extracto de pasiflora en los herbolarios. 

Otra manera de administrar las plantas es en forma de tisana, bebida que se consigue al hervir determinadas combinaciones de hierbas o especias en agua con propiedades parecidas o complemantarias. Es recomendable tomar estos preparados antes de dormir o en un periodo de calma si no queremos quedarnos dormidos encima del libro o del ordenador… 

¿Mariposas en el estómago?
Uno de los síntomas que se puede desarrollar en el estado de nerviosismo es un extraño hormigueo o nudo en el estómgao. Si nos relajamos, disminuímos la tensión de los músculos y también estas sensaciones; todo va ligado. Sin embargo, algunas plantas son más efectivas con los problemas que surgen consecuentemente en el aparato digestivo. 

Amapolas. Imagen de Flickr. Autor: J.L Mansilla 

La amapola (Papaver rhoeas), llamativa por el color rojizo de los cuatro grandes pétalos que componen sus flores, es conocida por sus propiedades sedantes. Éstas son adecuadas para tratar anomalías causadas por problemas de nervios en el estómago, como la mala digestión después de las comidas. Para este fin, se utiliza la flor de la amapola, que se debe dejar secar a la sombra.

Preparación de infusión de amapola:
– Se utilizan 2 g de pétalos secos y se colocan aproximadamente 250 ml de agua hervida aún caliente.
– Se deja reposar 3 minutos y después se filtra. Se puede tomar una infusión hasta 3 veces al día.

Matricaria chamomilla L. Imagen de pixabay. Autor: Hans 

Por su condición protectora y reparadora de la membrana gástrica combinada con sus propiedades calmantes, la manzanilla (Matricaria chamomilla L.) se utiliza para los nervios de estómago o trastornos digestivos de origen nervioso. Se aprovechan los capítulos florales que se conservan secos en recipientes cerrados. En forma de tisana digestiva es ideal tomarla después de comer para tener una buena digestión.

Preparación de infusión de manzanilla:
– Se hierve durante a penas 2 minutos, de 6 a 8 capítulos de manzanilla para cada taza de agua.
– Se cuela, se deja reposar 10 minutos y se toma bien caliente.

Plantas con energía
Ojo! También tenemos que mantenernos despiertos para aprovechar las horas de estudio, por lo que también utilizaremos plantas estimulantes, ya que contienen sustancias capaces de incrementar el rendimiento físico y mental. Los componentes que estimulan pueden ser aceites esenciales o sustancias capaces de aumentar la serotonina (sustancia encargada de transmitir las señales nerviosas a través de las neuronas). 

Flor de la planta del té. Imagen de Flickr. Autor: Doug McAbee 

Probablemente el estimulante natural del sistema nervioso más conocido es la cafeína, no recomendable para personas nerviosas. Está presente tanto en los granos de café como en las hojas de la planta del té (Camellia sinensis), pero para preparar un té hace falta menos cantidad de cafeína (teína), razón por la cual tiene entre la mitad y la tercera parte de sustancias activas excitantes que una taza de café. Todas las variedades de té derivan de diferentes variedades de Camellia senensis; el té verde, el té negro y el té rojo, son los que más se consideran como bebidas estimulantes por su contenido en teína.

Y hasta aquí esta lista vegetal de consejos prácticos, espero que los días de estudio y exámenes se hagan más llevaderos. ¡Suerte!