La fiesta de las frutas
Hoy, 9 de octubre, Valencia celebra su fiesta conmemorando la entrada del Rey Jaime I en la ciudad por ello, bloguera Inés Perales nos cuenta la historia que hay detrás de la tradición de la Mocadorà y nos da unos trucos para conseguir frutas de mazapán caseras.
El día de San Dionisio, Valencia celebra la entrada triunfal del Rey Jaime I a la ciudad, y el día de la Comunidad Valenciana desde que se aprobó el Estatuto de Autonomía. Los actos que cada aniversario tienen lugar están presididos por la Senyera de la ciudad.
Fuegos artificiales de la noche del 8 de octubre
También con motivo de las fiestas de la Comunidad Valenciana, la noche del 8 de octubre se celebra un festival internacional de pirotecnia que reúne artistas pirotécnicos de varios países en el viejo cauce del Turia, entre el Puente de Aragón y la Pasarela de la Exposición. Por cierto, el castillo de fuegos de la pasada noche estuvo pasado por humo pero se libró de la lluvia traicionera de después.
Laurus nobilis los pies del Rey Jaime
El día 9 de octubre y desde 1365, por privilegio otorgado por el rey Pedro el Ceremonioso, la Senyera es descendida desde el balcón principal del Ayuntamiento de Valencia y trasladada en procesión cívica hasta la Catedral. Allí se celebra un Te Deum, para a continuación llegar hasta el Parterre donde, ante la estatua ecuestre del Rey Don Jaime, se efectúa una ofrenda de coronas de laurel. Al finalizar el acto la Senyera es trasladada de nuevo al Museo Histórico.
Cartel de la mocadorà 2015 de Socarrat Studio. Desde Socarrat Studio explican que el cartel de este año es un grito a la libertad sexual representada con los iconos de peras y manzanas de Whatsapp
San Dionisio también es considerado el día de los enamorados valencianos y la tradición dice que los hombres han de regalar a las mujeres la mocadorà, un pañuelo del cuello que guarda productos de la huerta elaborados con mazapán y la piuleta y el tronaor, que recuerdan dos tipo de cohetes que se disparaban conmemorando el día de la Conquista aunque algunas lenguas apuestan porque, dada la forma de estas pastas, tienen un significado más carnal. Dicen que dicen que a la entrada de Jaime I en la ciudad de Valencia la gente le regaló frutas y verduras de la huerta rodeadas en un pañuelo y es esto lo que recuerdan las frutas de mazapán. Los hornos de la ciudad llenan sus escaparates de colores.
Los enamorados valencianos
No parece que los enamorados hagan cosas muy distintas al resto de enamorados del mundo a diferencia de celebrar San Donís así que, si os habéis quedado sin mazapanes voy a daros unas instrucciones para poder fabricar las frutitas en casa.
Al mezclar los ingredientes conseguiremos una masa con un aspecto parecido a este
Ingredientes:
– 200 gramos de almendra molida
– 200 gramos de azúcar molido (glass, que solemos decir)
– 1 huevo
– Colorante alimentario, a la venta en cualquier tienda especializada en pastelería.
– Un poco de clavo para los peciolos de las frutas
Procedimiento:
Separamos la clara de la yema de huevo. Mezclamos muy bien la almendra molida con el azúcar glass y la clara de huevo hasta obtener una masa homogénea. Separamos porciones de unos 15 a 17 gramos, y las redondeamos. No hay pesar, pero así nos aseguramos de que todas las figuras pesan lo mismo y se cuezan por igual al horno.
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Como por suerte, en Internet hay vídeos de todo, he elegido uno en el que se ve muy fácilmente cómo hacer las figuras. El protagonista del video compra el mazapán hecho pero dado que los ingredientes son tan fáciles de conseguir y sólo hay que mezclarlos, podemos hacerlo nosotros mismos. ¡Atentos a cómo se consigue la textura de la piel de la naranja! Y para los rabitos de las frutas: Syzygium aromaticum, clavo.
Syzygium aromaticum, clavo para hacer los peciolos de las frutas
Hechas todas las figuras, las ponemos en una bandeja de horno, pincelamos la superficie con la yema de huevo y ponemos en el horno a 200ºC hasta que se doran ligeramente. Cuidado con el horno, que se queman en un descuido y, si su horno tiene ventilador, no lo conectes, déjalo en la posición tradicional que dicen los manuales de cocina o arriba y abajo que dice mi abuela, es decir, el punto que tiene dos rayitas paralelas.
A pesar de que hoy el tema del artículo se ha alejado un poco de lo que es habitual, me apetecía reivindicar una tradición y una fiesta que se celebra con frutas. A pesar de que para el año 1238 no había ni naranjas ni kiwis ni muchas de las frutas que hoy día se representan. Sólo desearos que disfrutéis del día de fiesta y del puente y que si tenéis tiempo pongáis en práctica la técnica de elaborar figuras de mazapán caseras. Si os sale mal, usad la alternativa de la patata, rebozais la pelota de mazapán de canela y añadís un piñones a la masa.
¡Feliz 9 de octubre!