La plaga del mes es… el trip

Volvemos con la plaga del mes y esta vez hablamos de un insecto pequeño, con alas precarias y que sufre una metamorfosis a medias: los trips. Lo hacen muy bien es ¡comer flores! Y es esta dieta la que causa  problemas a los agricultores ya que los frutos crecen feos y poco apetecibles. Por eso, quiero recuperar un artículo que ya hace un tiempo se publicó en esta revista en defensa del consumo y el comercio de las frutas y hortalizas feas. La gente guapa come fruta fea, recuerdas?

Nace, crece, se reproduce … ¡y come flores!

Los tisanòpters son insectos pequeños, con poco más de medio milímetro que conocemos como trips. Suelen ser de color oscuro, marrón o negro y su nombre deriva del griego: tysanos-, que significa fleco y –pteron que significa ala. Algunas especies no tienen alas y usan el viento para desplazarse aprovechando los corrientes cálidas. Se alimentan exclusivamente de los vegetales gracias a su aparato bucal especializado en chupar la savia de las plantas. Se conocen unas 5.600 especies, muchas de las cuales son plagas del cultivo.

Frutos afectados por trips. Fuente: IVIA

Puesto que el orden de los tisanòpters es tan extenso sería un poco aventurado explicar un ciclo vital general, por eso, usaremos como organismo modelo, Pezothrips kellyanus, de entre los trips, el único que ataca las flores de los cítricos. Las hembras ponen los huevos en las partes tiernas de la planta, en los pétalos cuando hay flor y en los frutos jóvenes y hojas cuando la flor ha caído. Las ninfas viven en las flores, entre los pétalos y los frutos de los que se alimentan. Terminado el segundo estadio, las ninfas se dejan caer al suelo y allí, enterradas bajo las hojas pasan el tercer y cuarto estadio, dando por terminado su desarrollo. El ciclo completo dura entre 10 días (a 31-35 ° C) y 26 (a 15 ° C).

Conceptos importantes

En la metamorfosis incompleta (hemimetabolisme) el individuo pasa por varias mudas hasta transformarse en adulto sin pasar por una etapa de inactividad y sin cesar de alimentarse. Los estadios juveniles son la versión reducida del adulto aunque sin alas e inmaduros sexualmente. También pueden tener menor número de segmentos corporales. Este tipo de metamorfosis se da en algunos insectos y también en anélidos, equinodermos, moluscos y crustáceos.

Detalle de adulto de P. kellyanus. Foto de A. Tena

En este tipo de metamorfosis las fases juveniles se llaman ninfas. En la última muda acaban de desarrollar las alas, los genitales, la musculatura torácica para el vuelo, el sistema nervioso y algunos sistemas más específicos.

Por otra parte, en la metamorfosis holometábolo o metamorfosis completa se suceden las siguientes fases: embrión, larva, pupa y adulto. La etapa embrionaria tiene lugar dentro del huevo del que sale la larva que nada tiene que ver, en cuanto al aspecto y la ecología, con el adulto. La larva muda varias veces antes de llegar al estado de pupa en el que ocurren cambios drásticos que incluyen la diferenciación de los tejidos y órganos del adulto y la destrucción de los de la larva.

Importancia agrícola y control

Puesto que se alimentan de las flores o de las frutas, los daños en agricultura y horticultura son considerables ya que provocan deformidades en el frutos. Además, los trips son vector de algunos de los virus más dañinos, como el virus del bronceado de los tomates.

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Las escarificaciones alrededor del pedúnculo son un síntoma de la presencia de trips, aunque a veces estas marcas aparecen al frotarse los frutos contra las ramas. Los cultivos más afectados son los limones, las naranjas navel y pomelos en cuanto al cítricos pero hay más cultivos que son víctimas, hablamos del algodón del almendro, el cerezo, el ciruelo, el melón, las tomateras o el uva.

Si el ataque del trip sobre la flor se produce cuando el fruto es muy joven, este es abortado. Pero los trips tienen una cara más amable y es que se les atribuye un porcentaje de la polinización, aunque no hay estudios que proporcionan datos concretos.

Antes de pasar a las soluciones químicas hay que hablar de la prevención: para evitar que nuestras flores sean forraje de los trips, tendremos que eliminar las plantas cuya la floración estalle antes que la de nuestro cultivo. En cuanto al control biológico con enemigos naturales, hay experiencias que han demostrado la efectividad del uso de chinches como depredador de trips en cultivos como los pimientos.

Pimientos italianos. Haz clic en la imagen para conocer las tareas hortícolas del mes de abril

Por otra parte, hay que minimizar el uso de organofosforados ya que los trips se vuelven resistentes con mucha facilidad. Si tu cultivo es familiar, una buena alternativa es el aceite de neem, disponible en cualquier cooperativa.

Y hasta aquí el artículo de este mes, sólo desearos mucha suerte a aquellos que ya estéis preparando el huerto para este verano. ¡Feliz domingo!