Remedios caseros contra las plagas del jardín

Cuidar el jardín requiere dedicación, hay determinadas labores que debemos realizar de manera periódica para que las plantas estén sanas y bonitas: regar, limpiar flores y hojas marchitas, fertilizar, podar, etc. Es un trabajo que puede parecer pesado, pero la recompensa a nuestro esfuerzo es de sobra satisfactoria. Todas estas tareas son necesarias para que las plantas gocen de buena salud y crezcan resistentes a los ataques de insectos dañinos y hongos que provocan enfermedades en los vegetales. Esqueje de salvia 

Pero aun aplicando con esmero todos estos cuidados, en ocasiones descubriremos plagas que se instalan en el jardín y a las que las plantas no son capaces de hacer frente por sí solas. Lo habitual siempre ha sido recurrir a insecticidas y pesticidas comerciales para combatir este problema, pero cada vez somos más los que buscamos métodos alternativos a estos productos, bien por comodidad, por conciencia ecológica o incluso por economía. Y no, no es que los hayamos descubierto nosotros, son remedios de los que se valía el hombre antes de que existiera la industria química.

Cochinilla 

Nosotras hemos probado algunos métodos caseros y, para ser sinceras, algunos han funcionado y otros no. Los remedios naturales no son tan fulminantes como los pesticidas de síntesis, pero son menos agresivos con el medio ambiente. El secreto está en utilizarlos sistemáticamente y de la forma correcta. Si tenemos paciencia, y somos persistentes en su aplicación, serán una gran alternativa.

Existen multitud de productos que se emplean para combatir las plagas de manera natural. En la siguiente lista os contamos algunos, no los hemos probado todos pero tenemos referencias de que son eficientes.

Alcohol: de farmacia o de quemar, sirven los dos.

El alcohol es eficiente para combatir la cochinilla cuando la plaga no tiene una gran extensión. Nosotras lo hemos probado y funciona, las cochinillas adultas las eliminamos a mano y las pequeñas las limpiamos con un pincel mojado en alcohol. Así se retiran con facilidad y, si queda alguna, al estar impregnada de alcohol caerá muerta al poco tiempo.

Pintar a los insectos con un pincel pequeño

Aceites vegetales: oliva, girasol, de semillas, etc.

No es un método que nosotras hayamos probado, pero hemos leído muchas experiencias sobre ellos. Se utilizan aplicados con pincel sobre el insecto y actúan por asfixia. Para obtener resultados hay que ser persistente, y probablemente no baste una sola aplicación.

Jabón potásico

El jabón potásico es un gran aliado en el jardín que, además de ser efectivo contra plagas de insectos, deja las plantas limpias. Funciona contra pulgón, cochinilla, mosca blanca y otros insectos sin caparazón. También es útil para eliminar el hongo negrilla, un polvillo negro que invade las hojas después de una invasión de pulgones y otros insectos que excretan melaza.

Jabón de potasa 

Hemos hecho la prueba y podemos deciros que funciona. Con la negrilla es inmediato, pero contra los insectos hay que tener paciencia y ser constante. Se aplica pulverizando sobre la planta 30 gr de jabón disueltos en un litro de agua. Lo encontrarás en la sección de droguería del supermercado.

Canela

La canela tiene propiedades fungicidas y es muy útil para prevenir los hongos en semilleros. Nosotras lo hemos utilizado para proteger los esquejes hasta que enraízan. Se aplica espolvoreado sobre el sustrato en los semilleros o impregnando la base del tallo de los esquejes antes de plantar.

Brotes de lentejas

Cuando las lentejas comienzan a germinar producen grandes cantidades de una fitohormona denominada auxina, que es la encargada de estimular el crecimiento en las plantas. Un preparado a partir de los brotes de las lentejas puede sustituir perfectamente a las hormonas de enraizamiento comerciales y resulta más natural y económico.

Esuqeje de salvia

Azúcar

Las trampas de azúcar funcionan muy bien contra las golosas hormigas. No vas a terminar con ellas, pero conseguirás reducirlas en número y proteger determinadas zonas donde son una amenaza, como un césped recién sembrado o una planta que está sufriendo un fuerte ataque.

Para prepararlas, llena pequeños recipientes (un plato de café, la tapa de un bote de conserva, etc.) con almíbar, miel o leche condensada. Las hormigas se sentirán atraídas y quedarán pegadas.

Bicarbonato sódico

El bicarbonato actúa como fungicida y con él se pueden combatir algunos hongos como oídio y mildiu. El preparado básico consiste en disolver 10 gr de bicarbonato sódico (1 cucharada) en un litro de agua y aplicarlo con pulverizador sobre la planta: tallos y hojas, tanto en el haz como en el envés.

Pulverizador 

Otra versión de este preparado añade a la mezcla anterior tres cucharadas de aceite vegetal y una de jabón potásico. No hemos probado ninguno de los dos pero creemos que el segundo debe ser más efectivo. En cualquiera de los casos hay que aplicar una vez a la semana hasta que desaparezcan los síntomas.

Lo mejor de estos métodos es que son absolutamente inocuos, los puedes utilizar sin miedo incluso si tus hijos o mascotas juegan en el jardín. Esperamos que os sirvan para eliminar esas plagas que suelen instalarse en nuestras zonas verdes domésticas con la llegada de la primavera. Todavía faltan varios meses pero, cuando sea el momento, mejor que te pillen preparado. Combátelos a los primeros síntomas, cuanto antes los apliques más rápido obtendrás resultados.